Lo más importante si tu bebé la tiene, es mantener la zona bien limpia y seca y aliviar cuanto antes sus síntomas.
- Dermatitisdel pañal
- Dermatitis seborreica
- Dermatitis atópica
La dermatitis del pañal es el enrojecimiento de los glúteos y suele ir acompañada de rozaduras. Se debe a la irritación que produce la orina y la acción de las bacterias en una zona húmeda. Para tratarla hay que mantener la piel del bebé muy seca y cambiar el pañal frecuentemente. El tiempo que se pueda dejar el culito del bebé al aire libre.
La dermatitis seborreica es una erupción roja, escamosa y que produce picor se debe a la hiperactividad de las glándulas sebáceas, y su tratamiento es quitar las costras con aceite de almendras y un champú adecuado. Hay que evitar que el niño se rasque y mantener la zona limpia. No usar jabones ni detergentes.
La dermatitis atópica pica más que la seborreica y aparece la piel roja, seca y escamosa. Es conveniente no usar jabones y mantener muy seca la zona afectada. Puede ser necesaria una crema antiinflamatoria. Usar ropa de algodón 100%.
Hay que tener encuenta que la dermatitis atópica es una enfermedad inflamatoria crónica y recurrente de la piel. Por lo tanto, los niños con piel atópica tienen alterada la producción de lípidos de la piel, lo que disminuye la función barrera de ésta ( protectora y defensiva).
Esto provoca inflamación cutánea asociada a picor, enrojecimiento, sequedad (xerosis) y descamación. En ocasiones también puede aparecer, vesícula, exudación y formación de costras.
El consecuente rascado produce heridas que facilitan la sobreinfección bacteriana, agravando los síntomas. Se genera así un círculo vicioso de rascado, agravamiento del eccema, sobreinfección de heridas, inflamación, picor, rascado de nuevo...
Aunque según las estadísticas afecta alrededor del 10 % de los niños, la realidad es que en la farmacia nos encontramos cada día más casos y manifestándose, en la mayoría de ellos antes de los 5 años.
En los lactantes la zona más afectada suele ser la cara y superficies de extensión, mientras que en los niños son más frecuentes las zonas por donde se pliegan brazos y piernas.
El tratamiento va desde el uso de corticoides, en los brotes más severos, a sustancias emolientes que restauren la función barrera. En nuestra farmacia, tenemos tratamientos naturales que evitan o al menos espacian el uso de corticoides y que efectivamente alargan el tiempo entre brote y brote.
Según nuestra experiencia, si bien no se pueden evitar los brotes, sí que podemos espaciar su aparición y disminuir la intensidad.
Para ello es muy importante usar diariamente productos adecuados. El uso de sustancias emolientes que aporten lípidos es fundamental.
Pero ojo, vemos cada día en la farmacia que es importantísimo el gel con el que bañamos a nuestros niños, pues a veces todo lo que está haciendo una buena crema emoliente al restaurar poco a poco la capa córnea, lo impedimos si no usamos geles engrasantes adecuados que no lleven jabón , ni colorantes, conservantes, etc.
He aquí unos consejos importantes que siempre os damos:
- La hidratación en el paciente atópico debe realizarse después de los baños con la piel un poco húmeda, ya que así el poro está abierto y penetra mejor el producto.
- Aplicar los emolientes antes de salir al exterior, especialmente cuando hace frío o cuando hace mucho calor, y sobre las zonas expuestas a los agentes externos.
- Evitar el secado por fricción es también muy importante. Hay que secar realizando toque y evitar el uso de secadores porque pueden irritar la piel.
- También os aconsejamos cortar y limpiar muy bien las uñas, para evitar infección de las lesiones por rascado.
- Es preferible la ropa de algodón y lino (también la de la cama) que facilita la traspiración. Los tejidos de lana y sintéticos aumentan la temperatura corporal y por lo tanto el picor.
- Evitar así mismo el uso de lejías o suavizantes, que pueden irritar la piel. Aclarar muy bien la ropa.
- Evitar los cambios bruscos de temperatura. Mantener la temperatura y la humedad de la habitación lo más constante posible, evitando el exceso de calefacción que puede aumentarla temperatura y resecar el ambiente.
- Es mejor el baño que la ducha pues alivia el prurito, hidrata y permite limpiar la exudación y las posibles costras, siempre que se usen productos sobregrasos y con tensioactivos adecuados.
- Los baños se recomiendan de 5-10 minutos y a 33º de temperatura.
Encuéntranos en Facebook: https://www.facebook.com/FarmaLaPlazuela
Autor: Equipo Farmacia LaPlazuela
No hay comentarios:
Publicar un comentario