El cepillado diario de dientes es fundamental para que nuestros hij@s tengan unos dientes sanos.
Crear un hábito de higiene dental diaria puede ser algo muy divertido, siempre que nos las ingeniemos para convertir en un juego cada cepillado de dientes después de las comidas.
Además hay unas sencillas pautas que nos van a ayudar a proteger sus dientes frente a la caries. El azúcar es la enemigo número uno de nuestros peques. Pueden tomarla, pero no muy a menudo. Sus dientes van a ser para toda la vida, y si queremos que no tengan problemas desde el primer momento, es mejor que reservemos los dulces, galletas, bizcochos, zumos y bebidas azucaradas para ocasiones muy especiales.
Una alimentación sana tiene mucho que ver con unos dientes sanos, así que puede enseñar a su hij@ a comer verdura, leche, queso, yogur y agua entre las comidas, y si queremos darle un zumo, podemos diluir en 10 partes de agua una de zumo y mejor que lo tomen con pajita y no con biberón.
Utiliza para el cepillado una pasta de dientes con flúor para favorecer la remineralización de los dientes y prevenir la pérdida del esmalte.
Para los peques es conveniente visitar al dentista, para que detecte si hay o no formación de caries, ya que ésta en las primeras fases no causa dolor, pero el dentista puede detectarla a tiempo.
Autor: Equipo Farmacia La Plazuela
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