¿Cómo controlar la caída del cabello?


El cabello se nos cae a diario como un proceso natural, ya que unos cabellos son renovados por otros, mientras unos se van cayendo otros están creciendo. Perdemos al menos unos 100 cabellos al día.




Aunque no está demostrado científicamente, hay quien dice que en otoño se nos suele caer con más frecuencia, y se sospecha que puede ser recuerdo de nuestro ser primitivo cuando se mudaba el pelaje para prepararse de cara al invierno.

Aparte de todo lo que se pueda considerar como una caída normal del cabello, debemos estar atentos, y actuar cuando la caída de cabello sea anormal. Lo detectamos cuando se deja una gran cantidad de cabello en la almohada, en el baño, en el cepillo o el peine, en la ropa, a la vez que podemos notar una disminución importante de volumen y densidad.

Los factores que influyen en la caída del cabello pueden ser: condiciones ambientales, nutricionales, estrés, algunos medicamentos, predominancia genética y acción hormonal.

La causa más común de pérdida de cabello es la alopecia androgénica o calvicie común, que es hereditaria y que afecta tanto a hombres como a mujeres adelgazando el cabello hasta que éste desaparece.

Encontramos también razones importantes para que se produzca la caída del cabello como una dieta carente de nutrientes esenciales, las dietas milagro, el mal cuidado del cabello e incluso alguna enfermedad que habría que tratar como: problemas de tiroides, infecciones, estrés, anemia o alcoholismo entre otras. El abuso de tintes, secador y plancha de pelo pueden influir en la caída del mismo, al estropearlo y producir su rotura.

En la mayoría de los casos, la caída del cabello se puede controlar si se trata adecuadamente y desde los primeros síntomas.

Pueden ayudar a controlar la caída del cabello:

Un champú que contenga ingredientes activos específicos y científicamente probados, que ayuden a frenar la caída y estimule el crecimiento capilar. Su principal función es activar al microcirculación del cuero cabelludo para estimular el folículo piloso y normalice la secreción de las glándulas sebáceas.

Además han de contener vitaminas y agentes que nutran y fortalezcan el cabello para que su uso pueda hacerse a diario. 


Una buena higiene es importantísima para evitar que el sebo se deposite en exceso en el cuero cabelludo y provoque daños en el folículo piloso. El uso de un champú demasiado agresivo puede ser perjudicial, ya que los componentes del mismo han de adaptarse a las características de cada cabello.

El uso frecuente de un champú adecuado aporta densidad, fuerza y volumen al cabello, suavidad y brillo. Tras su aplicación podemos utilizar la correspondiente loción anticaída. Un masaje también ayuda a la microcirculación del cuero cabelludo.

No obstante siempre es recomendable consultar con un profesional. 


Nuestra recomendación para conservar un cabello sano además es una alimentación sana y equilibrada. Para el cabello es bueno consumir Omega 3, que se encuentra en el pescado azul; la biotina que se encuentra en el huevo, plátano, fresas; el cobre de las legumbres y los champiñones y el ácido fólico de los espárragos, las espinacas y el aguacate.

Ante cualquier duda que tengas consúltanos!!!

Autor: Equipo Farmacia La Plazuela

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